La aventura deportiva suele aflorar los sentimientos patrios en el país.

Hoy, merodeando por las redes sociales, estuve viendo fotos y videos del pasado Clásico Mundial de béisbol. Eso, a parte de revivir mis momentos de algarabía, me hizo pensar en una de las publicaciones que realicé en aquel momento cuando los rubitos no pudieron alcanzar el primer lugar.
Aquí les comparto un extracto de la misma:
“Yo voy a apoyar a #LosNuestros en la eventualidad que sea, porque para mí ser boricua va más allá de una moda del momento. Por eso, en esta noche le agradezco a #LosRubios y los felicito, sí , lo hago porque lograron lo que nadie había podido en mucho tiempo, UNIR A UN PUEBLO. Lo que ni siquiera alguno de los políticos mediocres con los que contamos había logrado. Indirectamente redujeron la tasa de criminalidad, estimularon la economía, le mostraron al mundo quienes somos, a nuestros niños lo que podemos lograr, que no todo está perdido, humildad y fe cada vez que elevaban una oración a Dios. Por último, lo más importante, le mostraron a Puerto Rico que si nos unimos somos más fuertes. Gracias muchachos, para mí son nuestros campeones. Mañana los recibiremos como a Tito y a Culson cuando cayeron, porque si nos trajeron alegría en las malas, nosotros vamos a estar ahí también en lo que sea. Buenas noches a todos, Arriba Puerto Rico, actívate siempre boricua. 🇵🇷⚾️❤💙”
Ahora bien, se preguntarán ¿y por qué ella nos hace mención de ese evento ya pasado? Lo hago porque en aquel momento escuché y leí muchos pensamientos, como por ejemplo, que, esos juegos no aportaban nada u otros que se quejaban porque no se obtuvo el primer lugar.
¿Saben qué?, para respetar la opinión de cada cual solo quiero mencionar algo; fomentar el deporte y actividades en las que las personas, en especial los jóvenes, se desenvuelvan y no caigan el las garras del ocio, de eso se trata. No es que nos olvidemos de fiscalizar o indignarnos por lo malo que está sucediendo en el país, es que nos da un respiro y un aliento que nos motiva a seguir luchando para sacar nuestra Isla a flote. El que nuestros deportistas nos unan y nos hagan florecer el orgullo patrio, no nos aleja de seguir en la lucha de nuestras causas.
Por otra parte, en el caso de las personas que se quejaban porque el #teamrubio no alcanzó el primer lugar, ¿son esas las mismas que celebraron en los tiempos de victoria?, ¿qué le enseñamos con eso a nuestros niños?, a no valorar el esfuerzo que durante años esos peloteros realizaron para llegar a donde están, o que si ellos no ganan no valoraremos su esfuerzo.
En mi opinión, estos últimos no son más que unos patriotas de moda, pero eso lo dejamos para otra publicación. Por el momento, mejor los exhorto a traer la lección que nos dio el equipo de Puerto Rico a los momentos en los que nos encontramos y a fomentar en nuestro niños y jóvenes la realidad que estamos viviendo, pero con reinvención y positivismo.